✨ La primera grieta ✨
Pero lentamente, sin que me diera cuenta, algo empezó a cambiar.
Me acuerdo como si hubiera sido ayer: intenté hacer por primera vez una tortilla de patatas. Estaba deliciosa, pero al darla vuelta se rompió. Terminó siendo un revuelto, sí, pero hecho con mucho cariño. En lugar de una sonrisa o una broma, recibí su furia. Me tiró el plato al suelo, gritándome que él no iba a comer “eso”. Me quedé congelada, en silencio, sin saber cómo reaccionar.
A partir de ahí, los choques se hicieron más frecuentes. Discutíamos por tareas de la casa, por opiniones diferentes, por cosas mínimas. Y muchas veces, todo comenzaba por malentendidos. Él pensaba que su alemán era tan bueno que entendía todo lo que yo decía… pero en realidad solo captaba algunas palabras, y el resto lo completaba con su imaginación. Se hacía su propia película, y reaccionaba como si su versión fuera la verdad absoluta. Explicar las cosas era inútil. No escuchaba. Con él no se podía hablar.
Al poco tiempo, cuando algo no le gustaba, ya ni gritaba… se convertía en hielo. Se encerraba por horas en una habitación, con un silencio que dolía más que cualquier palabra. Yo me quedaba del otro lado de la puerta, llorando, intentando que reaccionara, pidiendo perdón por cosas que ni siquiera habían sido mi culpa. Me empezaba a convencer de que el problema era yo. Que tal vez no sabía comunicarme. Que quizá no era tan buena como creía.
Ahí ya estaba en el medio de la niebla. Y la manipulación había sido tan efectiva, tan sutil, que hasta el día de hoy no sé cómo llegué a ese punto. Solo sé que todo lo que alguna vez fui, empezó a desdibujarse.

2 Comentarios
IRENE VERDAGUER
Querida mía,
Con tus palabras, que detallan miedo inmenso, ayudas a que esa niebla cegadora que, cómo bien dices, desdibuja la identidad de las víctimas, pueda desaparecer de la vida de las personas que actualmente estén en ese punto.
Que Grandioso es Allah, y cuánta fuerza te da, SubhanAllah.
Te quiero mucho hermana🩷
Maryam
Hermana querida,
muchisimas gracias por tus palabras. Es tal cual, no te das ni cuenta… Te quiero mucho!